miércoles, 3 de diciembre de 2014

Catarsis por confianza

Me siento triste. Desilusionada. Decepcionada. Y no se el por qué.
A veces esperamos mucho de las personas, quizás demasiado en ciertas ocasiones. 
Tiendo a pensar que todos deberían reaccionar como lo haría yo. Que como ellos no respondieron de la forma en la que yo lo hubiera hecho, está mal. Pero no. Porque yo soy yo, vos sos vos, y ellos son ellos; y cada uno piensa y actúa diferente, porque ellos son ellos, vos sos vos y yo soy yo.
Mientras me subía al colectivo sentía las lágrimas correr por mis mejillas. Reflexionando ya sentada, pensé que uno realmente nunca llega a conocer del todo a una persona, por más años y momentos juntos compartidos, siempre hay un gran secreto que todos guardamos. Y está bien. Probablemente ese pequeño gran secreto es lo que nos vuelve irreemplazables, lo que nos vuelve diferentes, únicos. En síntesis, lo que nos hace distintos. 
Pero duele. ¿Duele saber que esa persona no tuvo la confianza necesaria en mi como para contármelo?, ¿O duele saberlo después de tanto tiempo?
Probablemente siempre hay alguna pista que nos revela parte de esa historia, a veces logramos verla y otras no, pero más allá de la decepción y el rencor que siente uno al enterarse, te das cuenta de que realmente esa persona siempre basó su vida gracias a ese "secreto". 
El curso de nuestras vidas lo armamos nosotros mismos, perfecto. Pero, ¿lo armamos en base del ahora, o en base a que gracias a ese secretito? 
Es triste la idea de pensar en un mejor amigo, por ejemplo, que uno conoce prácticamente de toda la vida, y saber que lo que uno realmente conoce es la idea de vida que nos quiere dar esa persona. Que a esa persona en sí nunca la conoceremos o que quizás hayamos podido ver una muy pequeña parte de como es realmente. 
Mientras iba mirando las calles, la gente, y los edificios a través de la ventanilla, pensé en que la mayoría de esas personas seguramente no habían revelado ni la mitad de su vida ni siquiera a su propia familia. 
Pensándolo más a fondo, me di cuenta de que está bien. Está bien guardarse algunas cosas para uno mismo, pero personalmente pienso que si estás depositando tu confianza absoluta en una persona, lo mínimo que podías hacer era darle una perspectiva de tu vida similar a la que llevas realmente. ¿Tanto te costaba?
Soy muy resentida, creo que eso quedó claro desde un principio. Pero me lastima, y mucho. Siempre fui una de esas personas en que al conocer a alguien le da todo de sí, lo mejor que tiene y si esa persona lo quiere y lo sabe valorar, lo tendrá y si no, no; y me cuesta pensar que todos no sean así, porque imaginándomelo en mi cabeza, todo es más ordenado y más tranquilo de esa forma. De esta manera uno no pierde tiempo con alguien que no lo sabe apreciar. Pero desafortunadamente en ciertos aspectos, no todos pensamos igual. 

A la hora de confiar algo, tengo rotundamente entendido que absolutamente nadie es totalmente de fiar, que siempre va a existir esa parte forra de una persona y todo lo que quisimos que quedara en silencio va a salir a la luz. Me incluyo. Pero es así. Los tiempos y las modas cambian, y a pesar de que somos tan distintos en la forma de pensar siempre vamos a poner adelante lo que creemos necesario en el momento y siempre vamos a ser jodidos por alguien alguna vez.

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